Este blog ha sido ideado para plasmar en palabras los grandes y pequeños acontecimientos que van apareciendo en nuestra vida. Tal vez muchos vayan dirigidos a ti, lector conocido. O tal vez a ti que, aún pensando que me conoces, nunca lo has hecho

viernes, 12 de octubre de 2012

You are marvelous



A los que buscan aunque no (se) encuentren
A los que avanzan aunque se pierdan
A los que se levantan aunque se caigan
A los que sueñan aunque no duerman
A los que aman aunque no sean amados
A los que rien aunque lloren
A los que viven aunque se mueran

A todos ellos, sois unos héroes




Sin ti, 1 son 365...
Contigo, 365 son 1...

Tú eres maravilloso...


viernes, 5 de octubre de 2012

Bienvenido a mi realidad.

 
 


Como ya dije en una entrada anterior, hay canciones que son un fiel reflejo a lo que siento o a lo que pienso… o a ambas cosas. Se mezclan tanto con mis intenciones y pensamientos que se convierte una y otros en una masa uniforme donde se mezclan y confunden los sentimientos y las ideas, todo ello sazonado con una generosa ración de gusto musical.
 
Es el caso de “je veux” de Zaz, cuyo verdadero nombre es Isabelle Geoffroy, nacida hace 32 años en Tours y cuya voz me cautivó desde la primera vez que la escuché.
 
En “je veux” (quiero), Zaz va desgranando todo lo que quiere y no quiere que le ofrezcan. Todo lo que ama y detesta, y veo que pensamos de una manera muy similar.

 

¡¡Me gusta comer con las manos!! Me horroriza la gente que pela gambas o fruta con cuchillo y tenedor.

Soy profundamente sincera e incluso, a veces, dicen que llego a la brutalidad. Pero yo siempre digo lo mismo: “si no quieres saber la verdad, mejor no me preguntes, porque nunca te voy a mentir”.
 
Detesto los prejuicios. Creo que es un signo inequívoco de ignorancia y de un gran sentimiento de inferioridad.
 
Me asusta la intolerancia, sea de la índole que sea, ya venga por la izquierda o por la derecha. Muchas desgracias han devastado este mundo a consecuencia de ello.
 
No me gustan los regalos caros ni las “atenciones” excesivas. Me parecen artificiales y superfluas.

Quiero amor, pero del sincero y del que nace del corazón. Quiero que una mirada me diga mucho más que toda la palabrería que se le pueda ocurrir a cualquier Don Juan de todo a cien.
 
Necesito que se respete mi libertad, para mí es imprescindible para vivir respirando. No tolero que nadie se meta en ella, ni que se intente cercarla.

No quiero una rosa, prefiero un clip de color azul para guardarlo en mi cajita de recuerdos. El clip no se marchitará.

Quiero gente que me conozca porque se ha tomado el tiempo e interés de hacerlo. No quiero a mi lado a nadie que sólo piense en primera persona del singular.

Me gusta que me digan abiertamente lo que sienten… y lo que no sienten. Odio la incertidumbre...me aburren las personas que tienden a crear un misterio cansino a su alrededor.
 
A ti… bienvenido a mi realidad.